Redacción
En el Museo de la Ciudad, la secretaria de Cultura del estado, Ana Paola López Birlain, inauguró la exposición “Octubre 2025”, de Alexander Wertheim, conformada por un conjunto de pinturas recientes que continúan la exploración que el artista ha llevado a cabo durante los últimos dos años en diferentes estancias en Inglaterra, España y Alemania.
La investigación pictórica del autor alemán está marcada por un cambio formal con implicaciones discursivas determinantes; a diferencia de la obra inmediatamente anterior, en la que Wertheim empleaba pintura esmalte esparcida con aerosol, ahora recurre a la pintura acrílica aplicada por medio de brochas y pinceles.
Aunque ambos cuerpos de obra mantienen una correlación profunda a partir del sistema de pensamiento dialéctico que el artista desarrolla tanto en la obra de esmalte y aire como en la de acrílico y fricción, las pinturas de “Octubre 2025” están dotadas de una afectividad que le otorga a su imaginario abstracto una coherencia y potencia expresiva inédita.
Wertheim llega a su singular ejercicio pictórico a través de distintas derivas, pues al comenzar sus estudios, primero en la Universidad de las Artes de Berlín y posteriormente en Hunter College en Nueva York, pintaba campos de colores, por ejemplo.
Hasta hace poco el artista trabajó óleos fotorrealistas y figurativos; luego llegó a la abstracción gestual porque quería producir algo humano, algo falible, pero también algo que no pudiera calcularse, pues para él el gesto es el epitome de la humanidad, y el patrón es el sistema donde se incorpora.
En un constante ensayo, Wertheim ha configurado un enunciado en la pintura contemporánea a través de algunos pocos elementos esenciales: lienzos blancos impolutos, retículas de líneas horizontales superpuestas a otras verticales de toda índole de grosor, densidad y extensión, y una estricta gama cromática en la cual predominan ocres, verdes minerales y borgoñas de matices violáceos.
Las obras que se presentan en la exposición “Octubre 2025” son a la vez una declaración y un entendimiento de la pintura, en donde cada intento a su manera ensaya, practica, su propio registro, ninguno se asemeja a otro y, sin embargo, los enlaza un mismo sentido: ser un ensayo continuo sobre el potencial de la huella física, un estudio sobre su condición factual y espontánea.
Las obras de Alexander Wertheim pueden apreciarse de martes a domingo, de 12:00 a 20:00 horas, en el Museo de la Ciudad, ubicado en la calle de Vicente Guerrero Norte, número 27, en el Centro Histórico de Querétaro; la entrada es libre.

