Redacción
Desde Amealco, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo elevó el bastón de mando otorgado por el pueblo otomí (hñänñu), en esa región queretana para refrendar: “miren qué hermoso lo que está pasando en México. Entre todas y entre todos, cambiamos al poder judicial. Ahora tenemos una nueva Corte que va a tomar protesta el primero de septiembre. ¡Que viva Hugo Aguilar!, el próximo presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación”.
Tuvo más de seis millones de votos, dijo, ¿Ustedes creen que de otra forma un indígena hubiera sido presidente de la Corte? El pueblo lo decidió. Es mucho mejor siempre que trece millones de personas hayan decidido al nuevo poder Judicial a que hubieran sido unos cuantos senadores o la presidenta de la República. En México, ¿quién manda? ¡El pueblo, el pueblo manda!.
Sheinbaum Pardo añadió que su movimiento no llegó al gobierno “impuesto por una élite. Nosotros llegamos al gobierno por decisión del pueblo y gobernamos así… en 2018 el pueblo dijo, ‘basta’, tiene que haber una nueva historia en nuestro país, el pueblo decidió… en las urnas, con elecciones e inició una nueva historia. Seis años después, casi siete años después, salieron once millones de mexicanos de la pobreza”, indicó..
Se redujeron las desigualdades, señaló, porque en vez porque en vez de gobernar para los de arriba, se gobierna para el que menos tiene… Aquí en nuestro país se ha demostrado que a nadie se le deja atrás… disminuyeron las desigualdades, no tuvo que haber endeudamiento, no tuvo que haber aumento de impuestos, y acabando con la corrupción hay recursos para el pueblo de México… se demostró que el gobierno tiene que tener la palabra honestidad como su máximo. Tiene que tener la palabra honradez como un camino permanente.
La mandataria federal insistió que “ahora no solamente reconocemos la historia de nuestra patria que están en los pueblos originarios, sino que reconocemos a los pueblos indígenas de hoy, que representan la historia y la resistencia y la base de nuestra patria… queda claro en el segundo constitucional que los pueblos indígenas son sujetos de derecho, tienen patrimonio propio… Ahí claramente dice en la constitución que los pueblos indígenas deben tener su presupuesto propio… y eso es por siempre, no solamente en 2025″, destacó.
El presupuesto directo a las comunidades, aseguró, a los pueblos indígenas y afromexicanos este año tiene cerca de trece mil millones de pesos para todas las comunidades indígenas y afromexicanas”, dijo en la “Asamblea del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social para Pueblos y Comunidades Indígenas y Afromexicanas (FAISPIAM) de Amealco de Bonfil, Querétaro.
Los recursos, detalló la Jefa del Ejecutivo federal “se distribuyen para cada comunidad de acuerdo a su población, a su situación de pobreza. ¿A quién se le da este presupuesto? A la organización tradicional histórica de usos y costumbres de los pueblos indígenas, en asamblea se decide, para qué se va a usar y quién lo va a administrar. Se entrega el recurso y ustedes deciden para qué lo ocupa, Se hace una comisión que ejecuta y una comisión que supervisa. ¿A quién le entregamos la tarjeta? A alguien que ustedes eligieron como la tesorera”.
Durante la ceremonia de entrega del bastón de mando por autoridades otomíes, al inicio del acto, algunos presentes gritaban “no al Batán”, proyecto hídrico estatal que busca garantizar el suministro para más de dos millones de personas durante los próximos 50 años que se basa en el reúso directo de agua, sujeto a la aprobación del congreso estatal.