Redacción
El presidente municipal de Tolimán, Alejo Sánchez, se refirió al incidente ocurrido durante su participación en la tradicional peregrinación al Tepeyac, en la que fue derribado por una persona. Aseguró que la situación fue un imprevisto que se salió de control, subrayando que no se trató de una acción malintencionada por parte de los peregrinos.
Sánchez explicó que la mayoría de los asistentes a estos eventos religiosos lo hacen con un espíritu de fe y devoción, por lo que confía en que el acto de la persona que lo derribó no fue con malas intenciones. “Es triste que algo así ocurriera en un contexto tan significativo para nosotros, en una de nuestras tradiciones más queridas. No creo que haya sido una acción de mala fe”, comentó el alcalde en un video que compartió en sus redes sociales.
Aunque el incidente fue captado y viralizado en redes, el alcalde hizo un llamado a la comprensión, aclarando que no guarda resentimientos. Relató que, tras lo sucedido, dos jefes de grupo se acercaron para ofrecerle disculpas, gesto que fue bien recibido por el munícipe. “No siento enojo, ni molestia. Esto es parte de la espiritualidad de la peregrinación, y lo importante es vivir la fe al máximo”, expresó.
Además, Sánchez hizo un énfasis en que el incidente no causó daños graves, ya que solo fue un golpe por el impacto. “A pesar de todo, afortunadamente no hubo lesiones de gravedad. Es solo un pequeño contratiempo dentro de la experiencia”, añadió.
El presidente municipal aprovechó la oportunidad para pedir que no se juzgara en exceso a la persona involucrada en el incidente, sugiriendo que la situación mediática podría resultar más perjudicial para ella. “Lo más importante es que esto no se convierta en un juicio hacia alguien. A veces el bullying mediático puede ser aún más dañino que el propio incidente”, puntualizó.