Redacción
“No hay que hacerle sombra a la presidenta”, instó el exmandatario Andrés Manuel López Obrador, quien en su reaparición pública negó ser el cacique, el caudillo, el jefe máximo o “el poder tras el trono”.
Sin embargo, anunció que saldrá a las calles para “defender” a Claudia Sheinbaum si hay intentos de golpe de Estado, si atentan contra la democracia o si se violara la soberanía.
En un video publicado en sus cuentas de redes sociales, el tabasqueño –al presentar su libro Grandeza–, anunció que no recorrerá el país para promocionar el ejemplar porque está “jubilado” y pidió “apoyar mucho” a Sheinbaum: “Es temporada de zopilotes, hay buitres y hay halcones, aquí no, aquí hay pajaritos, y al rato vienen las guacamayas y vienen tropas de monos saraguatos”.
Así, el exmandatario advirtió que “sólo saldría a la calle por tres razones: una, si atentara contra la democracia como lo hacían antes, que hacían los grandes fraudes, los potentados, los oligarcas o los corruptos, para que el gobierno estuviese a su servicio. Eso ya no se puede permitir, de ninguna manera”.
Consideró que Sheinhaum “es la mejor presidenta del mundo”, pero hay quienes creen que “el mejor presidente es el de la mano dura, una mezcla de Franco con Pinochet, con Díaz Ordaz, con Salinas, que convierta al país en una cárcel”.
Y agregó: “Regresaría también para defenderla a ella, si hay intentos de golpe de Estado, si la acosan, salgo. Pero eso no creo que pase, de todas maneras no está mal que sepan en qué circunstancias podría yo salir.
“Y la tercera razón por la que saldría a la calle sería defender la soberanía de México, porque nuestro país es libre y es independiente, es soberano. Nosotros no somos colonia de ningún país extranjero. Nos ha costado mucho ser un país independiente y soberano. Y si se violara la soberanía, entonces sí saldría a la calle”.
No obstante, aseveró que tras su mandato optó por retirarse y “no sentirme insustituible, porque ese es el otro problema, el actuar como cacique, caudillo, jefe máximo, poder tras el trono, no, no, no, hay que hacer valer la democracia”.
Añadió que “nuestro movimiento, este movimiento impulsado por millones de mexicanos, tuvimos la enorme dicha de que quien me sustituya en la presidencia es una mujer excepcional y continúa la transformación”.
López Obrador, además, redefinió el significado de la democracia: “para el pobre tiene un significado distinto, la democracia. Para el pobre, la democracia es la sobrevivencia, es comer, es mantener a la familia, tener ingresos para garantizar la salud, el estudio, a los hijos. Para el que tiene recursos, puede ser un deber cívico. No pasa nada. Por eso hay quienes votan por los candidatos o candidatas más guapas o más guapos. Pero para el pobre es su sobrevivencia”.

